Época: España1
Inicio: Año 1700
Fin: Año 1800

Antecedente:
Introducción al siglo XVIII en España

(C) Virginia Tovar Martín



Comentario

La vasta extensión de un siglo obliga a distinguir algunas etapas que vienen a ser coincidentes con los procesos que acompañan los reinados de los cuatro primeros monarcas de la dinastía borbónica en España. El reinado de Felipe V (1700-1746), que tiene como imperativo el reforzamiento del Estado, la creación de un marco económico fuerte y el freno a la iglesia prepotente, en el campo de la cultura artística refuerza y estrecha los vínculos entre el arte español y el arte francoitaliano. Potencia la investigación y la experiencia artística española, en su espíritu y en sus iniciativas, y propicia una necesidad de encuentro entre lo hispánico y otras culturas extranjeras. El reinado de Fernando VI (1746-1759) no por corto fue menos fructífero, ya que su política abstencionista en el exterior, reforzó determinados impulsos de desarrollo económico, que favorecieron no sólo el fomento de las tradiciones transmitidas desde el reinado anterior, sino también haciendo efectivos medios institucionales, como las Academias de Bellas Artes, que, aunque de iniciativa anterior, desarrollaban en este tiempo su ordenamiento estatutario, sirviendo de plataforma a un método renovado de mirar y de instrumentar el proceso artístico.Se refleja un incremento en el mecenazgo de la música y del teatro, de una literatura crítica precursora del reinado siguiente y de la creación de centros de estudios y de investigación de ámbito extrauniversitario uniendo ciencia y técnica, teoría y práctica.En el reinado de Carlos III (1759-1789) se produce un giro brusco. El monarca no carecía de experiencia por sus años de aprendizaje como rey de Nápoles. En su gobierno se acentúa el concepto de la dignidad real, de la visión del monarca, en definición de Domínguez Ortiz, como deus in terris. Pero llevó una política exterior activa y un denso programa de reformas internas, el más atrevido hasta entonces, apoyándose en un presupuesto equilibrado. Las rentas aumentaron por el incremento natural de la riqueza. Las vacilaciones ideológicas serán las propias que se producen en el seno de la Ilustración. Rodeado de ministros de gran capacidad intelectual, se produce un movimiento de revitalización de la cultura artística en términos europeístas. El reinado de Carlos IV (1789-1808) se ha considerado como el primer acto de un drama que se prolongará durante medio siglo. Fue sin duda el epígono de una etapa próspera y el prólogo de un periodo histórico de quiebras y de incertidumbres. Se practicó una política dura, que no fue sino el producto del temor a la revolución. No obstante, la inercia del reformismo borbónico continuó, aunque con efectos muy moderados y resultados insuficientes. Carlos IV fue sensible a las artes dejando en la Villa madrileña de la Florida un emporio que quiso ser semejante a la Reale de Caserta.A lo largo del siglo hubo un desfile de validos extranjeros y una serie de buenos ministros españoles, que fue designación afortunada de los diferentes monarcas. Patiño, Carvajal, Ensenada, Aranda, Floridablanca, Jovellanos, etc., forman una lista de brillantes gobernantes que mostraron interés profundo por la cultura artística de la época.